Hay cosas que no es necesario vivirlas para saberlas, son por si solas. Me explico. Hace algún tiempo quede sin trabajo y por razones de subsistencia comencé ha hacer reemplazos como profesora básica en cursos del primer ciclo básico, al principio me compliqué ya que ésta no es mi especialidad, sino la educación especial, que ahora entiendo bien llamada "especial".
En la educación básica los niños son bien lindos, además de autónomos, investigando el mundo que se presenta ante sus ojos. Sin embargo, y aunque me resultó bastante fácil la tarea de "miss", el tipo de enseñanza que se me pidió entregará me complico en extremo, definitivamente esta es un reflejo de la sociedad en que vivimos, y que paradojicamente criticamos.
Debía enseñar para la media, los que quedan atrás deberán arreglárselas como puedan y los más aventajados, postergarlos para que no se alejen demasiado del promedio. Debía aceptar y valorar que sean individualistas y competitivos. Entonces se me vino el refrán / pastelero a tus pasteles/ prefiero la educación especial, donde a cada niño debo hacerle un plan específico, potenciando al máximo sus capacidades, evaluarlos a cada uno de acuerdo a sus logros y avances. Valorando cada avance y alentando en cada retroceso. Respondiendo cada día a sus lindas sonrisas y abrazos cálidos. Poniendo atención a lo que cada uno me dice ya que para él es importante.
Bueno algunos ya me van conociendo aborrezco la normalización , lo estandarizado, no comparto eso de la educación para la norma y cualquiera que se salga de ella, marginarlo.
Así es me gusta la educación especial, antes pensaba que era algo discriminatorio este nombre, ahora pienso que es la pura verdad es "especial" y mis alumnos, padres y profesores también.
1 comentario:
Hola, muy lindo lo que expresas, me gusta como te presentas eres una mujery cilena con mucha garra, te quiero pedir si que cambies la foto,no te hace juicio y te falta luz para reflejar tu bello rostro, te deseo lo mejor
nos vemos
erika
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